Los
ciudadanos “DORMIMOS” ante la contratación directa que hizo Cristina
Kirchner con China para construir el reactor nuclear (ATUCHA lll) que se levantará
en LIMA, Provincia de Buenos Aires, a tan solo 70 Kilómetros de la Capital
Federal.
Un tema
tan delicado se debió haber tratado seriamente, por la peligrosidad que acarrea la
energía nuclear, y las catástrofes que provocan en el mundo: en
España (Vandellós), en Rusia (Chernóbil) en Japón (Fukushima), en Japón después
del “tsunami” los técnicos siguen luchando para controlar los daños en
varias centrales nucleares, estos son solo algunos de los reactores que tienen
problemas gravísimos, si a estos les sumamos los que en la actualidad están en
“Crisis permanente” vemos que la energía nuclear no es confiable, en la
actualidad hay muchas maneras de generar energía no contaminantes.
Primero no se debería haber dejado en manos de Cristina Kirchner por no estar capacitada para discernir sobre energía nuclear, segundo no se sabe realmente que la motivó a negociar con China a no ser que los acuerdos y la instalación de "ATUCHA III" le haya dejado millonarios réditos.
Todos los
acuerdos con China y con Rusia firmados por Cristina Kircher siembran muchas dudas
por la manera urgente y arbitraria como los firmó.
El nuevo
presidente Mauricio Macri debe revisar todos los (acuerdos) que Cristina
Kirchner
Intempestivamente firmó y
si se descubriera que algunos perjudicarán a la República Argentina,
deberíamos estar preparados económicamente
para reintegrarles los millones
de yuanes que
el gobierno
Chino adelanto, y estar predispuestos
a devolver coimas, si se comprobara que algún
funcionario argentino hubiera
recibido dádivas
por avalar
sin ningún analicéis dichos acuerdos,
ya que
hay muchos casos de altos funcionarios
Kirchnerista
que recibieron coimas sin ponerse
colorados, algunos
de estos acuerdos están
caratulados "secretos"
uno de dichos acuerdos
es: La
base espacial China, que está
actualmente en construcción
en Bajada del
Agrio a
unos 300 kilómetros al noroeste de
Neuquén, son
200 hectáreas que Cristina
Kirchner a
su capricho decidió entregarles por
50 años, como si
fuera un territorio Chino dentro
de
Argentina no tendremos accesos a las
actividades que allí se realicen
y que en un
hipotético conflicto bélico
esa base por ser muy
estratégica podría ser bombardeada entrando la
Argentina en un conflicto
ajena a su idiosincrasia
pacifista.
Invito a leer:
coincido totalmente con vos, en cuanto los acuerdos con China el presidente hablo con el primer ministro Chino y quedaron en revisar los acuerdos a lo que aparentemente acedieron
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